Nos cansamos de buscar cremas con toda clase de sustancias y promesas, gastándonos grandes cantidades en cosméticos que tienen su efecto, pero que nosotras mismas saboteamos con unos malos hábitos. Para tener una piel de envidia, debes comenzar desde el interior. Con una alimentación adecuada puedes retrasar los efectos del envejecimiento, además de mantener tu piel hidratada y tersa. Apórtale los nutrientes que necesita y las cremas harán el resto.
Hoy en día hemos escuchado hasta la saciedad la importancia de una dieta equilibrada. No obstante, hay determinados alimentos te mantienen joven. Aquellos que llevan los conocidos antioxidantes son muy importantes, ya que retrasan la aparición de las arrugas, combatiendo los radicales libres. Los frutos del bosque y el té verde deben ser habituales en tu dieta, ya que te ayudarán a combatir las arrugas. El Omega-3 que hay en el pescado azul (sardinas, atún o caballa), mantiene la firmeza y la elasticidad de la piel, e incluso ayuda a combatir la celulitis.
Granadas y tomates también cuentan con antioxidantes, pero además ayudan a protegerte de los daños solares. De esta forma, los rayos UV, que son causantes de gran parte de nuestras arrugas, se mantendrán a raya y tú evitarás lesiones en la piel.
Los alimentos con vitamina C también son muy importantes, porque ayudan a producir colágeno, que es lo que mantiene tu piel tersa. Con el tiempo dejamos de producirlo de la misma forma, por lo que la gravedad nos afecta sin remedio, pero en frutas como el kiwi o la naranja encontrarás un gran aliado.
Por último, para preparar tu cuerpo para el sol o para unas vacaciones en Punta Cana, no olvides consumir alimentos naranjas y amarillos, que contienen betacaroteno. Esta sustancia te ayudará a evitar problemas con el sol, a que tu bronceado se prolongue más tiempo y sea mucho más inmediato.
Imagen: Maybelline
Fuente: Nosotras.com
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