Lo último de C.Pérez de Tudela

Descubre la última aventura de Daphne McGraw tras "Disparatado Asesinato en el Upper East Side".

Vuelve C.Pérez de tudela

"Extraña luna de miel", la apuesta más irreverente y provocativa del autor de la trilogía "Los Misterios de Daphne".

Un manual para tu día a día

Un libro que te cambiará la vida y te enseñará a cómo hacertela más fácil.

jueves, 28 de junio de 2012

Erase un culebrón - Temporada 2 - Capitulo 1 - El nacimiento


Había sido difícil pero el momento había llegado. Tan sólo unas pocas horas separaban a la chica invisible de la plena felicidad de ser madre. Habían sido unos meses muy duros, concretamente nueve. El encarcelamiento del padre de la criatura por la quema de fotos del rey de España había sido un golpe duro pero lo había superado.

Una nueva vida comenzaba para ella también; una etapa en la que más que nunca debería demostrar el tipo de mujer en el que se había convertido a causa de los golpes que la vida le había propinado.

Estaba en un after-hours tomando un zumo de piña con algo más cuando la gran tromba de agua se desató. Por suerte Gordinaria estaba allí para ayudarla. Raudas y veloces, ambas corrieron hasta el hospital más cercano. La chica bomba estaba en camino.
La primera cachorrita estaba a punto de nacer.

Al llegar a urgencias todos los médicos agradecieron la buena predisposición de la embarazada a dar a luz; las enfermeras comentaron que era todo un detalle llegar completamente depilada y con el asunto prácticamente al aire.

Esto último era debido a que la cabeza de la niña había comenzado a salir, y como la falda era corta se había subido unos centímetros por encima de la raja de la vida haciendo así la llegada inminente. Además, se había dado la casualidad de que la mujer invisible tenía suficiente zumo de piña en sangre como para anestesiar a una ballena y aquello le ahorraría el pinchazo de la epidural que tanto le preocupaba.

Entre la conciencia y la inconsciencia, sabía que aquella había sido su última aventura canina; a partir de aquel momento debía ser un madre sería y responsable. Se habían acabado las noches de juergas, el conocer y conocer chicos y el beber zumos de piña sin freno; debía ser un ejemplo para su bebé.

El parto duró tres horas. Mientras, en la sala de espera, estaban Bomba y Gordinaria esperando ansiosas. La primera recordaba amargamente el lugar debido a que meses antes se intoxicó y perdió a su bebé siendo hospitalizada allí.

El lugar, la tensión del momento, los malos recuerdos y la creciente frustración; le provocó una crisis, una locura mental transitoria. De repente pensó con compulsión que todo tenía que ser perfecto, todo debía estar en su sitio.

Por ello acto seguido de su bolso sacó un trapo y se dedicó a abrillantar el suelo. Atónita, Gordinaria preguntó a la joven que qué era lo que le estaba sucediendo; ella contestó que se tranquilizase, que ahora se encargaría de ella de todo. Pero… ¿Qué era todo?

Tras abrillantar las ventanas con un producto químico que también llevaba en su bolso, sacó una maquinilla de afeitar y un desodorante y se puso manos a la obra. Agarró a Gordinaria y en un momento la pasó por el improvisado departamento de chapa y pintura. La dejó depilada, maquillada y perfumada para así dar la bienvenida a la hija de su amiga. ¿Raro, verdad?

Algunos minutos más tarde, la puerta del paritorio se abrió y de ella salió la mujer invisible con su niña en brazos; a penas la pudieron ver. Siguiendo las indicaciones del médico fueron hasta la habitación de su amiga, y una vez allí comprobaron que Invisible estaba bien, sostenía en brazos a su hija, Cerecita.

La pequeña era una criatura adorablemente bella; tenía un pequeño capricho en su hombro derecho, algo curioso, un detalle que inspiró su nombre, un pequita en forma de cereza.

Mientras Gordinaria animaba a su amiga diciéndole que dentro de poco podría lucir tipito de nuevo en la playa, Bomba observaba a la pequeña con notable ansiedad. Deseaba tenerla, aquella pequeña criatura tenía que ser suya.

Acto seguido, mediante una excusa razonable, Bomba salió de la habitación en busca de un vaso de agua para la mamá. Pero en realidad lo que había ido a buscar era un disfraz para raptar a la pequeña.

En una de las salas encontró ropajes de sanitario y con ellos se atavió para así llevar a cabo su maléfico plan. Con el gorro de quirófano y con la mascarilla, era imposible que la reconociesen. Aquel era el atuendo perfecto para llevar a cabo su fechoría, no cabía duda.

Como Bomba era una petarda acabada; había estado durante semanas estudiando la serie de televisión “Urgencias” para así adquirir cierta credibilidad en su intento. Aunque aquel plan tenía una pequeña laguna, ¿Cómo se llevaría a la niña sin que le preguntasen nada? ¿Cómo disimularía su voz para que no la reconociesen? Pues bien, como ya he comentado anteriormente, Bomba era sumamente tonta y creyó que lo más convincente sería fingir una afección en la cuerdas vocales y simular que tenía un implante robótico para articular el habla. Por ello pensó que grabar una voz digital en su móvil dando explicaciones de por qué se llevaba a la niña serían suficientes.

Más tarde, de nuevo en la habitación; ni Gordinaria ni Invisible estaban demasiado al caso tras su última noche de juerga y aceptaron gratamente que aquella estrambótica doctora se llevase a la criatura. Sin sospecha alguna, de haber tenido suficiente cerebro entre las dos probablemente aquello las hubiese escamado, pero no fue así.

Pasado el rato, coincidiendo con la llegada de Meira, la nueva amiga de Invisible, comenzaron los nervios.

La madre, desesperada, presionó el botón de asistencia y una enfermera llegó rápidamente. Fue entonces cuando se confirmó que nadie del hospital había recogido al bebé en aquella habitación.

Así fue como comenzó la pesadilla de Invisible: Alguien había secuestrado a su hija.

De repente la puerta de la habitación se abrió, apareciendo de nuevo Bomba. Sólo que ahora no era Bomba, era una versión transformada de si misma; la viva estampa de una militante pepera.

La muy loca se había calzado un traje chaqueta blanco, unas perlas blanco nuclear y llevaba colgado del brazo un gran bolso Louis Vuitton. Seguidamente preguntó:

- ¿Qué sucede? –añadiendo rápidamente- Parece que alguien haya muerto.
- Tía, alguien ha secuestrado a Cerecita –explicó Gordinaria tremendamente preocupada.

A continuación un silencio opresivo e inaguantable se hizo con la habitación. Invisible no daba crédito a lo que estaba sucediendo y Gordinaria no podía creer lo que sus ojos estaban viendo, a su vez Meira aún no acababa de encajar lo que le habían explicado. La única que conservaba una pasmosa y anormal calma era Bomba; tal era su tranquilidad que al recibir la noticia dijo:

- ¡Oh, Dios mío! Menos mal que se me ha ocurrido traer una cesta de magdalenas –dijo sacando de su bolso una cesta de repostería casera- Las penas se afrontan mejor con azúcar… Para ti Invisible, y en honor a tu hija ten… -dijo ofreciéndole una coronita- Al menos se le parece en el nombre, y el tamaño más o menos es el mismo… además… si la hubieses tenido durante un ratillo más, también hubiese echado liquido amarillo con el de la botella- explicó riendo- Y ahora, si me permitís, necesito adecentar esta leonera.

Concluyó sacando de su bolso un arsenal de productos de limpieza para desinfectar la habitación y sacar brillo a fondo a todo aquel oscuro asunto.

A fin de cuentas ella no estaba nada preocupada, es lógico, pensó mientras abrillantaba los cristales mientras las otras la observaban alucinadas. ¿Con quién estaría mejor Cerecita con su tita Bomba?

Además, sabía que aquella historia acabaría bien; sólo necesitaba un poco de tiempo. Nueve meses le bastarían para hacerse con una nena como la de su amiga Invisible y entonces se la devolvería; aquel sólo era un préstamo, nada de decir que era un secuestro. Durante años ella le había prestado cosas a su amiga… ¿No era justo que ahora ella hiciese lo mismo?

sábado, 9 de junio de 2012

Erase un culebrón - Capítulos 7 & 8


CAPITULO SIETE – EL RETORNO DE LA BRUJA
Simia Lisa, era una copia china, de la famosa obra de arte de Leonardo Da vinci. Desde pequeña fue fea. Obviamente descendía de una de las ramas más directas de nuestros antepasados los simios. En ella y en su familia la teoría de la evolución no había hecho reparo.

Al llegar a la adolescencia descubrió sus poderes. Una importante conexión astral con los poderes que dominan el universo y su capacidad de volar en los días de mucho viento gracias a los alerones que tenía en lugar de los hombros.

Simia tenía una gran uniceja, pero no la tenía en la frente. En sus años mozos descubrió las maquinillas de afeitar y borró temporalmente aquel pequeño bigotillo. Aunque también en un descuido se afeitó las cejas.

Durante una temporada se quedó sin expresión alguna. Pero a ella no le hacía falta. Su belleza estaba en el interior. Concretamente en el fondo del caldero en el que hacía sus pociones.

Todos los hombres del mundo estaban enamorados de ella. Nadie podía resistir ese aspecto malayo, exótico y bizarro. Era como si a su paso las hormonas masculinas bailasen el “boggie, boggie” danzando en busca de su amor y su atención.

Simia tenía el don de encapricharse de los hombres que gustaban a sus amigas y hacía patéticas y lamentables exhibiciones de conquista frente a sus “amigas”. Esto la alejó poquito a poco del grupo. Ese hecho y su obsesión con combatir con Satanás. Ella se comunicaba con la oui-ja como quien lo hace con un nokia. Con toda la naturalidad del mundo.

Su madre era un poema, era como la copia morena de la bruja Lola. Cateta, soez y ordinaria como ella sola. Bruja desde su juventud había metido en el mundo de lo esotérico a su hija, la “elegida”. Así fue como entre las dos y al enterarse de que los amigos de su hija le habían dado puerta, no por ser extraña y peligrosa, sino por envidia de su belleza y su poder, urdieron una venganza.

En conjunto prepararon una pócima mortal. Esta tenía como objetivo conseguir que los padres de los miembros del grupo fuesen muriendo poco a poco. Y así fue, los padres de Rasputín y la chica invisible fallecieron. El de Mikita también, pero consiguió regresar a la vida.

CAPITULO OCHO – FALSAS APARIENCIAS

Los días transcurrieron rápidamente desde que el chico radioactivo se enteró 
de que su pareja prefirió afinar el violín de otro músico antes que el suyo propio. Difuso y movido por una rabia desmedida decidió castigar a la chica bomba con que cargase con su intento de suicidio durante el resto de su vida. Siniestramente y poniendo en practica una vez más sus malas artes de sádico pasivo alineo sobre la mesa su juego de cuchillas preferido y escribió una pequeña nota con su propia sangre: “Me has traicionado, me marcho… Hasta siempre”

Como bien sabemos el pasado siempre regresa cuando menos lo esperamos y así fue en esta ocasión también. Mientras el chico tóxico urdía su plan Simia Lisa poniendo en marcha el suyo. En vista de que su maldición no había alcanzado a su ex amiga decidió tomar la justicia por su mano y hacerle pagar todo el dolor que ella creía que le había inflingido en el pasado no adorando su belleza y todas sus virtudes.

El sonido de la puerta fue plomizo. Alguien perturbaba el pequeño intento de suicidio del mini chantajista emocional. Asustado y perturbado porque fuese la chica bomba recogió y abrió la puerta. Al otro lado de la puerta esperaba Simia con un pañuelo empapado en formol que hizo que el violinista cayese inconsciente en el acto. Rápidamente lo metió en la jaula de hamster que llevaba y lo secuestró.

Paralelamente. En el baño de una discoteca la mujer invisible estaba haciendo un test muy peliagudo. El predictor. Durante toda su vida había practicado el acto amoroso ebria perdida, pero en aquella ocasión no fue así. Su jueguecito de conquistadora le había salido mal. Se había topado con un desalmado que la había enamorado hasta las trancas. Y que muy probablemente también le había dejado un regalo. Algo que solo podía desenvolver dentro de nueve meses.

Al regresar a casa la chica bomba encontró la nota de novio y entendió que lo sabía todo y que la había abandonado. Lo que desconocía era que había caído en las manos de una peligrosa depredadora. Dejó caer aquella nota de despedida y con suavidad acarició su vientre. Sola y abandonada ahora ¿quien la ayudaría a criar a su hijo?, ¿Y lo peor de todo, como descubriría de cual de aquellos dos hombres era?

Mientras tanto Gordinaria continuaba guardando los bolsos en la discoteca. Teniendo en cuenta que habían pasado ya dos semanas desde que la dejaron esperando en la discoteca debemos entender que nunca fue una chica demasiado avispada. Pero de repente, al rascarse el escote y descuidadamente dejando ver parte de su turgente pecho, de las sombras salió Ferrario, un joven que llevaba el mismo tiempo abandonado allí porque sus amigos tampoco le habían avisado de que se marchaban. Eran la pareja perfecta. Aquel era el inicio de una bonita historia.

Continuará... (Fin de la primera temporada)

miércoles, 6 de junio de 2012

Erase un culebrón - Capitulo 5 & 6


CAPITULO CINCO – LA MALDICION (PARTE 1)

No hay que confundir la velocidad con el tocino ni el sentido común con la sensatez. Se puede tener del uno pero no poseer el otro. La chica invisible siempre estuvo por encima de los demás. En madurez, en sensatez, a nivel emocional… Pero en ocasiones la vida es cruel y da fuertes golpes que nos transforman en otras personas. Personas que son una sombra de lo que fueron y que poco a poco se alejan perdiéndose en la oscuridad.

Todo empezó con el fallecimiento de su padre. Experiencia que obviamente la marcó para siempre. De primeras se refugió en sus amigos. Necesitó de ellos y ellos estuvieron ahí por ella. Si esperar nada a cambio.

Todo andaba sobre ruedas. Las cosas fluían correctamente pese a también recientemente haber perdido a la mujer bomba. Pero no siempre es todo lo que parece y no siempre las amistades están a la altura de lo que se espera de ellas, en este caso por ambas partes.

La mujer invisible necesitaba marcha, necesitaba desenfreno, necesitaba ser otra persona. Refugiarse en actos muy alejados de lo que ella había sido. Obviamente cuando un cambio es tan radical, y no se tiene a nadie alrededor que lo apoye uno se ofusca, se amarga y acaba recurriendo a otro tipo de soluciones.

Realmente la amistad de la chica invisible y la mujer bomba jamás fue muy profunda. Si tuviésemos que definirla diríamos que era algo superficial e interesado. Eran una pareja perfecta de petardas preparadas para ir de compras. La mujer invisible tenía esa faceta fashion y a la vez una gran responsabilidad e inteligencia para con la vida que la hacía una persona muy sensata.

En contrapunto a ella estaba la mujer bomba. Siempre fue alocada y divertida. Extraña y particular. Pero finalmente opto por vivir la vida a su manera. Una manera que según ella no era compatible con sus amigos. Un estilo de vida que no dejaba hueco al pasado.

Era la situación perfecta. Una chica que renegaba de su pasado. Y otra que necesitaba olvidar. Como una perfecta aleación química se unieron forjando poco a poco una amistad que hoy en día si que es real y profunda. Siempre, y de manera extraña, la chica invisible llevó como equipaje de mano a Gordinaria. Realmente las experiencias religiosas unen mucho, y claro, uno no se confirma a si mismo cada día.

CAPITULO SEIS – LA MALDICION (PARTE 2)

Ya se dice que por el interés te quiero Andrés. La mujer bomba necesitaba fiesta, y como las otras dos lobas eran ya animales nocturnos se unieron configurando así el grupo de las caninas.

Lo que hacían o dejaban de hacer no nos es de gran interés desde un punto de vista evaluativo ya que como es lógico cada quien tiene el derecho a hacer lo que le venga en gusto siempre y cuando respete los derechos de los demás. Y fijaros bien que no estamos hablando de sentimientos, porque eso si que no se respetó.

La vida es curiosa, y las maldiciones diversas. Existe una profunda y fundamentada creencia que persiguió durante un tiempo a este grupo de amistades y que se basaba en que: “Debe morir un padre por año” y así fue en el año siguiente. Rondando las mismas fechas.

En esta ocasión murió el padre de Rasputin, personaje conflictivo y zizañero donde los halla. Siempre jugó a manipular y malmeter a unos y a otros consiguiendo así el odio y el aprecio a la vez de muchos de ellos. Suele ser común en todas partes que hay personas que están a la altura de las circunstancias en ocasiones como estas y otras que no.

Por lo general tendemos a pensar que los amigos están junto a una persona en esos momentos. Que se desviven por acompañar y por ayudar. Pero hay ocasiones en las que no es así. Ya sea porque trae un mal recuerdo o porque sencillamente se está tan alejado ya de esa realidad que no interesa mezclarse en ello. Así fue como una vez más una de las amistades de aquel grupo fue haciendo mella y acabó como tenía que acabar. En la nada.

Cosa extraña cuando estamos hablando de amistades profundas y afianzadas. Que vienen desde tiempos de la EGB. Demasiado pensarán algunos, poco pensaremos otros. Y así fue como aquella sensata chica se transformo en algo invisible y se perdió en la nada.

lunes, 4 de junio de 2012

Erase un culebrón - Capitulo 2 & 3


CAPITULO DOS – MELODIA DE OMISIÓN

La chica bomba rompió con todo. Cambió de vida radicalmente. Obtuvo su felicidad. Obviamente la felicidad es muy relativa y siempre se mide por el rasero propio. Las escalas de valores cambian y las preferencias por las cosas también. Y por ello se inmoló.
Es bien cierto que en ocasiones en la vida hay que romper con todo. Dar al traste con lo antiguo y darse en volandas a lo desconocido. Dicho y hecho. Con facilidad y sin remordimiento abandonó a los suyos en post de un mañana mejor.

Conoció al que nosotros cariñosamente apodaremos chico radioactivo, pues sus largas temporadas en Txernobyl le infectaron con el síndrome de los círculos en el maíz, pero en su caso en medio de la cabeza. Era evidente que era su pareja perfecta. Tamaño, inteligencia, valores, sensibilidad, etc… Incluso en lo atormentado y oscuro de su ser.

El dolor es una llave, una perversa forma de jugar con la mente y el chico toxico conocedor de esto y de otros muchos oscuros trucos practicaba constantemente el arte del sadomasoquismo consigo mismo intentando escapar de la realidad que tan pequeño e insignificante le hacía. Una y otra vez se repetía: “A veces la realidad es tan abrumadora que solo provocándonos un profundo dolor podemos evadir los extraños sentimientos y sensaciones que evocan de nosotros derivados del hacer de los demás” Gritaba en noches de luna llena al son de su sangriento concierto de violín

Se dieron amor mutuo. Se procuraron cariño. Y lo más importante… la apoyó en su paso decisivo para romper con su pasado. Lo que el chico toxico no sabía es que la mujer bomba tenía un gusto desmedido por lo ajeno. Siempre fue y será una insatisfecha crónica…. Y puede más la lujuria en su vida que la propia palabra de amistad o de amor que pueda jurar.

Cual ewook acervatillado practicante del canon estético franciscano el chico toxico claudico. Acepto en silencio la situación y desvió la mirada. Se fundió una vez más en una profunda sonata violenta y desesperada que dejó huella en él para siempre. Jamás olvidaría lo que sucedió. Jamás sería capaz de ponerse unos pantalones en aquella relación. Nunca perdonaría a la chica Invisible por divulgar ese tan conflictivo y vergonzoso secreto…

CAPITULO TRES – NOCHE DE LOBAS

Hoy ahondaremos en la vida de Gordinaria, gran valquiria vikinga amiga de la mujer invisible y la chica bomba. Nació de una flatulencia, de ahí su aspecto de pedorra. Gordinaria vio mundo. Gracias a ello aprendió muchas cosas. Se empapo de un saboir faire peculiar. En seguida aprendió un estilo de vida que la distinguía de las demás féminas. Decidió no depilarse las axilas.

Había sido concebida por culpa de la ingesta de una lata de fabada en mal estado. Entre un olor nauseabundo y un tremendo esfuerzo su madre la trajo a este mundo de manera imprevista en el callejón de la parte trasera de una parroquia. Si conocerse bien el porqué la abandonó en un cubo de basura próximo a la puerta trasera del edificio. Los llantos desesperados de tan pobre criatura atrajeron al cura que la rescató de tan pestilente espacio.
El padre ciruelo, enjuto y alto, la crió en la fe. Grabó a fuego en su piel los valores Cristianos y la educó como si fuese su hija. Aquella férrea disciplina religiosa no hizo más que alimentar sus ansias de pecado y cuando la joven cumplió la mayoría de edad abandonó su sagrado hogar en busca de experiencias.

Gordinaria ya había hecho sus pinitos con el vino de la sacristía pero aun no se había adentrado en el mundo de los cócteles de garrafón. Y sin pensarlo se vistió con sus mejores galas y puso rumbo hacía un mugriento local musical llamado “Polvos Mágicos”. Aquella sería la primera de muchas más noches.

Conoció a la mujer invisible en una operación de caza y aprendió dos cosas: Que con cinco copas de más es más fácil dejarse tocar por desconocidos y así ligar con más atino, y, que las cacerías zorreras son más efectivas en grupo ya que arrimándose a buen árbol las sobras son más jugosas… había nacido una gran amistad.

Reseña: ¿Tuya o mía? Dos mujeres y un destino - Lola Z.Kodak


Reseña Patrocinada por "Descubrelo"

Y continúan los grandes descubrimientos en las estanterías de Al Campo a precios de risa; Se podría decir que los restos de serie en materia literaria de las grandes superficies son como un AMAZON. En estos lugares se encuentran novelas a precios asequibles pero con la diferencia de que en Al Campo y otros no hay cabida para el naciente mercado de la literatura pseudo-novel.

Aunque también se corre el peligro de acabar con grandes petardos entre las manos como sucede en ocasiones en AMAZON. La diferencia reside en que en el caso de los ebook autopublish, no hay nadie detrás del proyecto velando por su cálida mientras que en los libros que acaban tirados en dichas estanterías sí. En esos casos siempre hay una editorial, la cual cosa hace aún más grave que esos petardos anden circulando por el mercado libremente. Podríamos decir que la operación se hace con premeditación y alevosía, casi con mala fe.

El caso es que hace unos meses acabó en mis manos “¿Tuya o mía? Dos mujeres y un destino” de una tal Lola Z.Kodak, pseudónimo del autor/a, reconozco que la compré pensando que era un Chick Lit a la española y no, todo lo contrario, es una historia dramática con alguna pincelada de comedia que resulta realmente interesante.

En líneas generales, la historia trata sobre dos mujeres de caracteres diametralmente opuestos, una es prostituta y la otra maestra, que se ven forzadas a compartir un largo viaje en busca de una amarga verdad: ¿La persona muerta de Méjico es hermana de la una o de la otra? Durante tan tenso viaje se forja entre ambas una relación muy especial que es suficiente como para ser eje central de toda la novela. Es de lectura fácil, ágil y para lo ligera que resulta su lenguaje es bastante rico. También ayuda su corta extensión.

Conclusión, una novela horrible si hubiese pagado 15€ (Qué es el precio original), pero por 3,95€ digo que me parece muy aconsejable.

domingo, 3 de junio de 2012

Erase un culebrón - CAPITULO 1


INTRODUCCIÓN

Aun hoy en día me considero afortunado de haber conocido a la mujer bomba…. Extraño, ¿verdad? Bastante, pero cierto al cien por cien. La ficción y la realidad habitan a nuestro alrededor fundiéndose constantemente y eso es lo que sucedió hace ya algún tiempo.

De repente, cual talibana, la heroína atómica explosionó. Nos alcanzó causando gran impacto en nuestras vidas, pero… ¿De que sirve un arma tan peligrosa cerca? De nada. Con el tiempo se acaba entendiendo que personas así merece más la pena que estén lejos.

Pero el hecho en sí es que no cabía mucho que esperar de alguien que aseguraba que una moto es más segura que un coche. Lógica inversa. Gracias a sus poderes de premonición, y según ella, alegaba que de una moto se puede saltar antes de tener el accidente.

Aunque es un lastima que los poderes premonitorios de la chica bomba no sirviesen para detectar las malvadas intenciones de la mujer invisible, personaje que en próximos capítulos conoceremos, y hasta aquí puedo leer (como decía Marta Gomez Kempt)… ¿Cuál será esa gran traición? … continuará.

CAPITULO UNO – CRÓNICA DE UNA TRAICIÓN

Erase una vez una pariente lejana de bob esponja. Alias la mujer invisible. Seguramente os preguntareis porque sus conocidos la conocían con ese apodo. Bien sencillo. En la ocasiones que se la necesitaba era como sino existiese. Incluso de cuerpo presente era capaz de transformarse en un transparente y frio tempano de hielo.

La chica bomba y la mujer invisible aparentemente a parte de genitales femeninos no tenían nada en común salvo su desmedido gusto por el olor masculino y su sed insaciable de bebidas etílicas. Aparentemente mujeres hechas y derechas, de fachada reluciente, pero con una trastienda totalmente desordenada.

La historia se inicia tiempo atrás, en un oscuro tiempo en el que el precio de la amistad se cotizaba a la baja y en el que hábilmente con una destreza ancestral las dos protagonistas de esta historia blandían sus relucientes y traicioneros sables esperando el momento preciso con el que poder degollar a sus victimas.

Como ya hemos narrado en la introducción todo empieza con un ataque terrorista. Las secuelas de dicho ataque separan a la población en dos grupos. Los seguidores de la secta del cubata y los descendientes de la orden del sentido común.

Ambas facciones conviven durante algún tiempo enfrentadas. Pero sabiamente, y como en toda gran guerra, existían esquiroles. El trabajo de la mujer invisible durante este periodo fue recabar datos de ambos grupos y revelarlos al mejor postor.

Durante algún tiempo la mujer invisible se integró en el seno de la orden del sentido común engañando por completo a todos sus adeptos. Obviamente, y de manera inicial, digamos que como buena maquinadora estuvo oteando cual de los dos bandos ofrecía mejores condiciones para así acomodar su estilo de vida al que más encajase.

Al parecer desde un principio entendió que para pertenecer a dicho grupo debía pagar una mensualidad que abonaba regalando pequeños y muy grandes detalles de los movimientos de la facción enemiga. Hasta que de repente un día fue descubierta…

Estreno en Exclusiva - Erase un culebrón

Blogueros y blogueras, tras algunas negociaciones con el autor hoy nos complace hacer un re-estreno de la novela "Erase un culebrón" de C.Pérez de Tudela. La novela fue escrita en el año 2008 y fue concebida como si fuese una serie de televisión. La obra está organizada en capítulos de corta duración con continuidad entre si y en su totalidad se distribuye en 3 temporadas muy distintas la una de la otra. 

En su momento levantó bastantes ampollas, sobretodo entre los que se dieron por aludidos, es importante tener en cuenta que los personajes que la componen existen en realidad, el autor nos presenta sus andanzas bajo excéntricos pseudonimos. Por ello la controversia y la transgresión son los pilares fundamentales que hace de esta novela una historia distinta a otras. La extrema hilaridad y la demencial evolución de las tramas son algunos de los elementos que la hacen una novela divertida, original y espontanea. 

No os la podéis perder... y recordad: Al mal tiempo buena cara, y que mejor cara que una cara con una exagerada sonrisa provocada por esta novela.

Muestra de Micro-Relatos


Era un joven solitario, áspero como la arena, un individuo poco amigable. Dejó que el tiempo pasase e intentó mantenerse al margen de todo, quería centrarse única y exclusivamente en perfeccionar su mente y su cuerpo.

La noche de la muerte de su padre, sentado en la sala de urgencias, juró hacérselo pagar a todos los responsables del asesinato. Era abogado y trabajaba en un importante caso, trataba de conseguir una condena para un grupo de narcotraficantes.

Tras su asesinato se hizo con el informe de la investigación policial y urdió un ambicioso plan para darles caza. Diseñó una maqueta de lo que iba a ser su cámara de torturas y posteriormente la construyó.

Era un espacio que en el futuro acabaría convirtiéndole en el asesino que es hoy en día. Y es que la línea que separa la justicia del delito es difusa y cualquiera puede llegar a traspasarla.


Ser tacaño a veces sale más caro que el no serlo. Lo entenderéis enseguida. Hace algún tiempo tuve discrepancias con la justicia, una pequeña tontería. Estaba en la playa jugando a voleibol y me entró arena en los ojos, caí al suelo y rompí  una maqueta que estaba expuesta en el paseo marítimo.

Obviamente aquello conllevó una denuncia y una posible condena. Ser tacaño hizo que quisiese defenderme yo mismo. Ahorrarme el abogado. Redacté un informe de lo sucedido y me encaminé a la sala donde se celebraba la vista.

Al tiempo recibí la sentencia, llena de latinismo, era un texto denso y difícil de entender. Continuaba negándome a pagar un abogado y busqué un traductor. Su servicio fue económico, pero si hubiese sido abogado al leer “Addictio bonorum libertatum servandorum causa” me hubiese alertado rápidamente de su significado.

Ahora estoy detenido y no me importaría pagar a un abogado.

Por C.Pérez de Tudela (2008)